LODVG y Viva Suecia hicieron vibrar el Jardín de las Delicias
La segunda jornada de El Jardín de las Delicias llegó cargadita de actuaciones memorables y de una fiesta continua. Inazio fue el encargado de abrir la tarde del sábado, que ya pasó el año pasado por este festival, pero ahora se subía con mucha más fuerza y en un escenario más grande para deleitarnos con su sonido más indie folk.
Durante las primeras horas, la movilidad era muy fácil por el recinto. También, hay que destacar los espacios de promoción y los culinarios. Aunque, es cierto que los precios están desorbitados. Entiendo que pagan un plus por estar en un festival, pero no es económico para todos los bolsillos.
Malmö 040, banda de chicos catalanes que vienen a pasos agigantados por el mundo de la música. Con su rollo más pop rock español realizan un show muy compacto, potente y con un buen sonido. El gran momento fue La última canción donde lograron que cantara todo el festival.
Depol llegó al escenario Bosque para hacernos disfrutar de temas como Ibiza o Quién diría. El artista se comió el escenario ya que era imposible moverse entre el público con tanto baile.
Andy y Lucas no quisieron perder la oportunidad de despedirse del público madrileño en este festival. El público ya estaba al 75% y el dúo gaditano puso a cantar y bailar durante una hora a todos los presentes. Por supuesto, no faltaron sus temas más icónicos Son de amores y Tanto la quería. Y, durante su actuación decidieron subir a fans al escenario al igual que regalar franelas.
Beret reunió a mucha gente ya que era la hora de llegar ya al festival. No hay mucho que destacar de esta actuación más de lo de siempre y dejándonos siempre a medias en una actuación que no está perfecta vocalmente. Aunque, es cierto que no dejó de cantar sus canciones más famosas y eso hizo que el público consiguiera engancharse a él.
En el Jardín de las Delicias no cabía ni un alfiler cuando a las 22:00 horas se lanzaban sobre el escenario una de las mejores bandas de pop en español, La Oreja de Van Gogh. Increíbles e impecables durante toda su actuación con un sonido súper limpio. Hay que dar la enhorabuena cuando realmente suenan genial. Durante sus 28 años de carrera vemos como Leire hace de cada una de sus actuaciones pura magia. Nos deleitaron con todos sus temas y, la verdad, que no sabría con cual quedarme porque fueron espectaculares. Desde Muñeca de trapo, Inmortal, Rosas donde se vivió un momento espectacular o La playa. Por decir algo negativo diría que la invitación que hicieron con Diego de Veintiuno se quedó bastante flojita e incluso se destrozó un poco la canción. Él no estuvo muy acertado con la voz durante la noche.
Si hay algo que tenemos muy claro de la movida española, es que en Murcia han nacido grandes bandas, sobre todo en lo que se refiere al indie. El Jardín de las Delicias lo demostró una vez más con la actuación de Viva Suecia. Sonaron increíble y se comieron el escenario como ningún otro grupo. Diría que fue la actuación estrella de este año. Son una pedazo de banda que tocan maravillosamente bien y, me atrevo a decir que si los ves una vez repites más. Se llevaron una ovación continuada desde No hemos aprendido nada hasta que terminaron con El bien.
El cierre de esta edición fue para Taburete que no era la primera vez que pisaban este escenario. Y, consiguieron que la gente siguiera cantando y saltando hasta el final con todas sus canciones.